Bangerz es el cuarto álbum de estudio de la mundialmente conocida cantante Miley Cyrus, sacado a la venta oficialmente el 8 de octubre de 2013. La recepción del mismo fue buena, contándose hasta la fecha más de 2.000.000 discos vendidos y más de 8.000.000 de copias digitales vendidas de los singles extraídos de dicho álbum.
Bangerz supone un cambio radical respecto a su anterior discografía, tanto en las influencias como el estilo o las intenciones. Es un álbum más sólido que los anteriores y logra un sonido más enfocado, aunque no personal. Y es lo que pasa cuando te arrimas a los más demandados productores y raperos del momento para lograr hacer un disco grande: que lo despersonalizas. Oren Yoel, Stacy Barthe, Timothy Thomas, will.i.am... y sobretodo, Pharrel Williams y Mike Will Made it. Todos parecen haberse juntado para hacer el disco por ella, pues viendo los créditos nos damos cuenta de que su participación a la hora de componer las canciones ha sido de chiste: en pocas canciones vemos su nombre inmerso en una lista que no baja de los cinco: ¿Cinco personas para componer una canción? No podemos pretender así tener marca propia. Precisamente, su nombre no ficha en absoluto en la lista de los responsables de componer dos de los tres singles que han promocionado Bangerz (Wrecking ball, Adore you), mientras que en We Can't Stop se ayuda de unos cuantos.
De esta manera, no nos extrañará ver el sello de Pharrel Williams de forma tan descarada en algunos de los cortes del álbum, como #GETITRIGHT (o On my own en la versión deluxe), totalmente compuesta por él y con un sonido demasiado parecido a temas de su discografía, como Come get it Bae. Vamos, que solo le faltaba ser él el intérprete del tema.
Partiendo de esto, y con la máxima de que no estamos ante un disco personal, nos encontramos con un trabajo que vaga entre sonidos urbanos, hip hop, electropop, dubstep y country-rap, aunándolos todos de manera efectiva para darle una apariencia uniforme, y comenzando de manera muy elegante con Adore you, una balada pop que líricamente no suena a la "madurez" prometida, pero sí más que My darling, la cual, a pesar de su cuidada producción no deja indiferente a nadie con ese "Podemos hacer una película y va a ser en 3D".
Los rellenos también tienen su hueco nuevamente en este álbum de Miley. La mayor representación de ello es Maybe you're right, recordándonos éste a los medio-tempo's más flojos de la carrera de la cantante, o incluso peor.
Casi tan irrelevante como la colaboración de Britney Spears en Bangerz es la canción en la que participa: SMS (BANGERZ), un tema bastante urbano y burdo en cuanto a sonido que por suerte dura poco.
Sin embargo, no todo es malo en Bangerz. Al contrario: como se dijo antes, el conjunto es paradójicamente sólido, y esto se consigue con temas como ese single de presentación We can't stop, el cual, salvo esas horribles voces en off, y pasando por alto nuevamente una letra nada ejemplar y rimas patéticas ("ladadidadi. We like to party, dancing with Molly"), es una invitación de Miley para entrar en su onda, para dejarte llevar. 4x4 también llama la atención desde la primera escucha pues, aunque otra vez notamos demasiado la presencia de Pharrel, la mezcla de pop urbano con una especie de rap-country suena muy bien en la voz de Miley.
Temas de mayor madurez son los que tratan el desamor, como ese potente Wrecking Ball o mejor aún, Drive, baladas poco usuales que funcionan sin ser demasiado dramáticas ni pastelosas.
Claro que ninguno de estos temas, por muy buenos que sean, pueden compararse con la canción estrella que Miley ha decidido no hacer single por razones que no entendemos, porque ese FU que canta con French Montana pide a gritos ser single y convertirse en su mayor éxito, y es que es sin duda, una de las mejores canciones que ha hecho la artista, con una Miley Cyrus furiosa, una participación nada cansina de French Montana y una mezcla del piano y dubstep que simplemente está a otro nivel que nada en este disco va a alcanzar. Un 10 para este tema.
Claramente, Cyrus se las ha apañado para buscar gente competente para perfilar este álbum como lo que ella quería que fuera. Aunque es evidente que se ha quedado a medio camino, estamos ante un disco sólido y más adulto (aunque no sabemos si mejor que Can't be tamed) en el que hay sitio para buenas baladas, temas dance y electropop nada decepcionantes (Someone else marca un gran final del trabajo), así como un compendio de estilos urbanos más acordes con la imagen que la cantante quiere dar; no obstante, si además queremos oír algo que nos suene a Miley, hace falta más implicación por su parte (Cosa que ha tenido en cuenta en su nuevo álbum gratuito Miley Cyrus and her dead pets, que aún estamos digiriendo). Quizás así, haciendo algo menos pretencioso salga un álbum menos cargante, menos excesivo,
Temas destacados: FU, We can't stop, 4x4, Drive
Puntuación: 6,3/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario